DOÑA MERCEDES
Doña Mercedes Duré de Giovanetti era una dama de la ciudad de Gualeguay. Llegó a estos pagos como institutriz de los hijos de la familia de Don Ramón Burman. Luego las circunstancias de la vida hacen que se afinque en una casona de la familia Reato. Con el tiempo Hermenegildo Reato y su familia vienen a vivir desde el campo a esta casa y comparten la vivienda.
Esta buena señora con espíritu enérgico y clara inteligencia y mucho carácter, se decide a armar el ambiente dentro de la comunidad de Mansilla para crear una Institución con totales fines de caridad cristiana. Así es que con muchas dificultades, consigue reunir un conjunto de Damas y Señores que se aprestan a colaborar con Doña Mercedes para el levantamiento de la obra. Esta flamante Institución se llamaría “Sociedad Damas de Beneficencia”. Llenados los trámites y cumplido con las reglamentaciones del caso, la Sociedad resuelve hacer su acta inaugural y en forma solemne como Sociedad queda constituida el día 10 de Junio del año 1928.
Ya la Sociedad en marcha, comienzan las actividades de trámites y resoluciones a cumplir. Esto acompañado de una reunión semanal de la Sociedad, para organizar las bases fundamentales de la futura y difícil labor. Se reunían los días jueves en la casa de la familia de Don Enrique Monti y su señora Doña Rosa Daldini de Monti. Como hecho anecdótico, Doña Mercedes en las reuniones manejaba un timbre manual niquelado, que hacía sonar en forma estridente, cuando las Damas reunidas se salían de los temas a resolver. Ahí comenzó la lucha sin cuartel para ir obteniendo fondos para enfrentar la obra. Fueron años de luchas y sacrificios de todo el conjunto y además un conjunto de varones que con el titulo de “consejeros” participaban. Se trabajó no solo en Mansilla sino también en la mayoría de las localidades vecinas y la campaña. Se recibían donaciones, se hacían fiestas de todo tipo, con venta de cédulas, juego de ruleta y bolillero. Fiestas danzantes, obras de teatro con gente nuestra. A todo esto se llevaba una administración férrea con comprobantes y Balances de Entradas y Salidas.
Doña Mercedes era la Capitana del barco y el estandarte de la Obra. Así surgió la flamante “Sala de Primeros Auxilios”, hoy Hospital “Nuestra Señora del Carmen”. Una vez levantada la Sala y su habilitación preferente para todos los pobres sin recursos, la Sociedad siguió con su obra de allegar fondos para su mantenimiento, ya que el subsidio oficial era muy escaso. Además la Sociedad Damas de Beneficencia, atendía el recetario para los pobres “de solemnidad” cuyas recetas eran emitidas por el Director de la Sala Dr. Rafael Ángel Del Gaizo.
Estas valientes Damas hacían verdaderos milagros para sostener y seguir llevando adelante la Obra. Doña Mercedes estaba siempre al frente y acompañando al necesitado. ¿Por qué no recordar como se merece a una figura que fue pilar de la caridad pública en Mansilla?
Volviendo atrás, diré que el 4 de abril del año 1937 se concretó la inauguración de la Sala. Mansilla tenía ya servicio hospitalario y de atención al pobre. Sepamos todos en Mansilla, que no hay que olvidar las obras del pasado, que son los cimientos del presente, ni tampoco a los personajes que han servido de puntal para que tamañas obras se llevaran adelante.DOÑA MERCEDES: Que goces en la Eternidad de los frutos que mereces. Que Dios bendiga tu Alma y que te encuentres en el Mundo Eterno de los Justos y que la caridad que repartiste, sea corona de gloria.